lunes, 14 de mayo de 2007

Cosiendo la penumbra

Cosiendo la penumbra
con los ojos de mis dedos
te recuerdo
con la memoria de mi piel
con el olfato de mi sombra
encendida
ahora que ya no duermo
ahora que se ha quedado
la campana muda
y soy sólo respiración
que soy huella en el agua
para el rastro de mi sangre
un estallar del vacío
que incendia la habitación
una piel esparcida,
eyaculada como un grito
la pura imagen tiritando
como el sueño de las aves
un cuerpo emergiendo del río
bajo el lenguaje de la claridad
un espacioso y único sonido
donde cosiendo la penumbra
te escondes.//

2 comentarios:

sandra dijo...

poemas de dolor...el dolor hace brotar la poesía...!

Basquiat dijo...

en este caso parece que si, gracias por el comentario.